HASTA YO ESTOY INDIGNADO

No me gusta mucho hablar de política, pero hoy me voy a animar por todas las cosas que están pasando estos últimos meses tanto en el mundo como en España en particular. No pertenezco al movimiento 15M. Quizá en un principio sentí simpatía por ellos por ser un movimiento apolítico y pacifista donde tenía cabida todo el mundo, fuese cual fuese su ideología política, pero ahora ciertos partidos o tendencias políticas se han establecido en su seno y lo están utilizando para sus fines particulares, utilizando en algunos caso la violencia y la provocación, así que ahora soy un indignado por partida doble.

Voy a enfocar el problema en España puesto que es desde donde tengo una mayor perspectiva…..el problema básico es el desencanto de la ciudadanía  hacia los políticos y la sociedad actual. Casos de corrupción, intento de establecimiento de una ingeniería social, recortes de las libertades, recortes sociales, paro, crisis económica…….

En España ya no hay estadistas como en la época de Transición democrática Española. Ahora no hay políticos preocupados por bien de la sociedad en su totalidad, sino políticos controlados por las grandes empresas y bancos que desean el poder a cualquier precio para sus propios fines, y esos fines desde luego no son los de hacer que un país prospere o también políticos interesados en reabrir heridas que nuestros padres y abuelos cerraron hace tiempo y que ahora como conviene políticamente se vuelven a reabrir enfrentando a personas que ni tan si quiera saben cuándo ocurrió ese lamentable suceso que rompió este país en dos.

Necesitamos una democracia directa en la que podamos elegir libremente a nuestros candidatos y que no tengamos solo la opción de elegir a una lista que nos imponga un partido político. Necesitamos que los políticos piensen en sus ciudadanos, en el progreso y el bienestar social a pesar de los intereses de las grandes empresas, bancos y corporaciones.

Pero una democracia no será real hasta que los propios partidos no la tengan. Hasta que las listas de los partidos políticos sean abiertas y los candidatos puedan ser elegidos por sus bases, hasta que no se rompa las disciplinas de partido y se vote por lo que uno piensa y no por lo que le diga su líder en plan borrego. En definitiva….hasta que no haya una democracia real en los partidos políticos que en teoría son los garantes de la democracia, no habrá tal.

Necesitamos una separación real de poderes. No es necesario aplicar recortes sociales o aumentar los impuestos para salir de la crisis. La solución es muy sencilla, pero hay que tener el valor de aplicarla. Este país se ha convertido en un reino de “tahifas” donde las competencias están duplicadas con el consiguiente gasto. Tenemos más funcionarios  que Alemania teniendo la mitad de población, tenemos Generales que su única función es calentar sillones, tenemos más senadores que EEUU……Necesitamos que el Estado Central vuelva a recuperar competencias que nunca deberían haber transferido a las CCAA como sanidad, empleo o educación.

Hay muchas más cosas que se deberían de hacer, pero hasta que los líderes políticos no hagan una autocritica y realicemos una segunda Transición democrática esto no se va a solucionar, sino que irá a peor.